Qué difícil (el sistema «pull»)

Tanto hablar de Zara (Inditex) y qué poco caso hacen de su ejemplo.

Zara es un ejemplo nítido de aplicación del «Just in Time» (JIT) aplicado al sector textil (Inditex sería más bien un ejemplo de cómo sustituir el negocio de la ropa por la compra y posterior alquiler de bienes inmuebles, un poco al estilo MacDonald’s). Todos quieren ser como Zara. Pero muy pocos entienden el modelo de producción en que se basa. Una cosa es predicar y otra repartir trigo, vaya.

Fue Toyota quien, en 1948, diseña e implanta la filosofía JIT, una filosofía productiva inventada por ese genio que fue Taiichi Ohno, uno de los pocos genios que en el mundo han sido (el resto son, como los Womack & Cia, simples copiones e inventores de nuevos vocablos de éxito, como es «Lean»). Con el JIT, Toyota integra la actividad productiva en el mercado, hasta entonces siempre distante y exclusiva de la parte comercial y de atención al cliente.

A los amantes de las prisas, los mismos que requieren una implantación Lean en poco más de tres meses, convendría recordar que una mente privilegiada como Ohno tardó 20 años en realizar una implantación total de su JIT o Lean. Asumamos la curva de experiencia y acortemos este tiempo: de acuerdo. Pero si usted nunca se ha preocupado por el Lean o el JIT, adquirir la nueva filosofía y no reducirlo a una simple moda le va a costar algo de tiempo. Más de tres meses, seguro.

Nosotros apostamos por una gestión de producción basada en el «Sistema Pull» (que es justo lo que hace Zara a escala global). Y lo llevamos a cabo a través de tarjetas Kanban que adaptamos escrupulosamente a las cualidades de las empresas que confían en nosotros: no solo a las productivas, también a las personas y su forma de trabajar.

Es tan fácil como establecer un sistema por el que, cuando se usa un material o ha finalizado una etapa de un proceso intermedio, hacer que algo envíe una señal al proceso anterior informando que se encuentra listo para actuar y reemplazar la vacante de material o producto. Si esto lo extendemos a toda la cadena de producción, desde el cliente final hasta los proveedores, encontraremos un «Sistema Pull» magnífico y usted empezará a producir como si fuese Zara (es un decir).

¿Qué difícil, verdad? Pues sí, pero no. Lo difícil suele ser implantar la mentalidad de cambio que conlleva implícitamente.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Al continuar utilizando nuestro sitio web, usted acepta el uso de cookies. Más información

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra POLÍTICA DE COOKIES, pinche el enlace para mayor información. Además puede consultar nuestro AVISO LEGAL y nuestra página de POLÍTICA DE PRIVACIDAD.

Cerrar